Se prohibe pensar

La agencia católica Adista ha filtrado hoy, una semana antes de la fecha de publicación programada, las instrucciones aprobadas el 31 de agosto por el papa Benedicto XVI, las primeras de su pontificado, en las que llama a no admitir en los seminarios y en el sacerdocio a aquellos que practican la homosexualidad, tienen tendencias homosexuales profundas o apoyan la cultura homosexual. (...)

El artículo continúa y es que no solo prohiben las prácticas, sino hasta pensar y apoyar a los homosexuales... Ellos ponen sus normas, claro, pero ¿hasta que punto esto es legal? prohibir entrar en "un club" solo por pensar es totalmente anticonstitucional y recuerda a los tiempos de la Inquisición, de los que tanto quieren alejarse. Reflexionen por favor.

¿Quien adoctrina a quien?

Este es el cuento de un colegio concertado donde los niños de 2 de ESO están en clase de “prensa”. La profesora del colegio les pide a sus alumnos para la semana que viene que realicen un periódico, un niño levanta la mano y le dice a su “seño” que entonces va a ver el nuevo canal Quatro para enterarse de las noticias y así poder escribir el periódico. A lo que la profesora le contesta "no veas ese canal que ahí no trabaja ningún periodista de verdad, el único que tienes que ver es Antena 3, donde si trabajan periodistas de verdad y así sí que aprenderás".

Ojalá este fuera un cuento… pero es la cruda realidad, es lo que pasa en el colegio católico Calasancio de Alicante. Esa misma profesora acudió a la manifestación que tuvo lugar en Madrid en contra de la LOE, que recuerdo, se quejaba del carácter adoctrinador que tiene la nueva ley del Gobierno y que no deja elegir a los alumnos. Además pasaron a los padres una circular arremetiendo (literalmente) contra la nueva ley de educación, y animándoles a que acudieran a la protesta, y les preguntaban a los niños la razón por la que sus padres no acudían a dicha manifestación.
Me pone los pelos de punta ver como se juega con los niños. La formación es la base para el futuro del país y, por consiguiente, no se pueden cambiar las leyes cada dos por tres. Ya es hora de que se sienten de una vez a hablar y entre TODOS los partidos lleguen a un acuerdo, no se puede seguir politizando la educación de esta manera.